La Relojería Navas es uno de los establecimientos comerciales más antiguos de la localidad de Porcuna. Fundada a finales de la década de los 40 del pasado siglo, comenzó su andadura en un pequeño cuarto de la calle Colón, hasta trasladarse, primero al número 8 de la Carrera de Jesús, y finalmente con la década de los 80 a su ubicación actual en el número 22 de la Carrera, vía principal y centro neurálgico del pueblo.
Durante décadas, en su primera etapa, el duro trabajo de los hermanos Navas (Rafalito, Manolito y Jesús) fue creando lo que poco a poco se convirtió en un negocio consolidado, incorporando la venta de electrodomésticos, surtiendo a muchas familias del pueblo, desde las primeras radios de galena y las máquinas de coser Singer, pasando por relojes de bolsillo Longines o de pared, hasta las modernas televisiones en color K-30 o lavadoras Balay.
En las dos últimas décadas del siglo pasado, se incorporó la siguiente generación (Rafael Lorenzo, Manuel Carlos y otros como Fernando), surgiendo el videoclub, la venta de cassettes y compact disc, y por supuesto continuaron vendiéndose relojes, frigoríficos, artículos de regalo, lámparas, etc…
En la actualidad, la Relojería ha cumplido ya 65 años, y sigue tan activa como el primer día, adaptándose eso sí a las nuevas tecnologías: teléfonos móviles de última generación, mp4, videoconsolas, Blu-Ray, televisores 3D o bombillas de bajo consumo… quién hubiera soñado siquiera tener tantos adelantos hace sólo unas décadas. Quién hubiera pensado siquiera en la existencia de una página web desde la que cualquier persona del mundo pudiese contactar con nosotros, aunque sólo sea para decirnos un simple «hola», aunque sólo sea para que un porcunero que viva en la otra parte del mundo nos pueda decir: «de pequeño, en los años 70 yo estuve varias veces en vuestra tienda cuando venía al pueblo en los veranos», eso ya paga de sobra el esfuerzo.
Cuánto ha cambiado todo, y cuánto ha de cambiar. De aquellos programas de feria de los 60 apenas quedan abiertos ya 3 ó 4 comercios en Porcuna, el resto desaparecieron. Pronto se incorporará la tercera generación, y sin duda que vendrán más, y esperamos poder escribir algo parecido dentro de otros 65 años, o al menos otros lo harán por nosotros, en extraños y modernos ordenadores que hoy ni podemos adivinar cómo serán.
Y que ustedes, por entonces, lo lean…
Gracias a todos los que en estos 65 años nos han dado su confianza. Hemos intentado dar lo mejor de nosotros para servirles, y lo seguiremos haciendo, pero sin vosotros, esto no tendría sentido. Por la parte que nos toca, gracias al pueblo de Porcuna.